A todos los jóvenes les encanta jugar en el barro, y no es diferente para estos traviesos cachorros de león.
Pero van a causarle más dolores de cabeza a su madre, porque tres de los cuatro nuevos hermanos son leones blancos ultra raros… y sacar la suciedad de su pelaje cremoso va a requerir mucho lamer.
Estas extraordinarias imágenes son las primeras fotografías de leones blancos recién nacidos en la naturaleza.
Se encuentran en un solo lugar en la Tierra, la región de Greater Timbavati en Sudáfrica, donde solo quedan 13, y esa cifra incluye a estos cachorros.
Es un trabajo serio ser tan jóvenes, tan raros y tan lindos. Pero estos personajes animados tienen sus patitas llenas explorando y practicando sus juegos de lucha. Mientras los miembros mayores de la manada están atentos a los peligros, los cachorros se divierten.
Pero no se sabe quién es el padre porque los cachorros no son albinos, sino que deben su coloración extraordinaria a un giro genético que muchos leones de Timbavati llevan. El gen del pigmento de leucismo les da ojos azules o verde grisáceos en lugar de marrones, y un pelaje que permanece blanco toda su vida.
Al igual que un rasgo familiar humano, el gen recesivo puede permanecer inactivo durante generaciones y luego reaparecer, por lo que cualquiera de los machos leonados podría haber sido el padre de estos cachorros. 
Incluso es posible que dos adultos marrones tengan una camada de cachorros blancos, pero solo si son leones de Timbavati.
La tribu indígena Shangaan ha conocido a los leones blancos durante siglos, y sus hombres de medicina tradicionalmente creen que son ángeles animales.
Una leyenda dice que fueron las primeras criaturas creadas por los dioses, y cuando la vida se extinga, el rugido de los leones blancos será el último sonido en la Tierra.
