El mundo animal es increíblemente diverso y lleno de misterios. A veces, entre especies que parecen no tener ninguna conexión, surge un lazo que las une, llegando a considerarse como miembros de una misma familia. La conmovedora historia de la maternidad entre un noble Golden Retriever y un leopardo, compartida por Actualidad.rt.com en 2018, es un ejemplo conmovedor de esta sorprendente armonía entre especies, que ha cautivado al público.
La pareja madre-hija “reaciosa” es extremada++=mente unida. (Foto: Actualidad.rt.com)
En el zoológico de Vladivostok, en el Lejano Oriente de Rusia, se produjo un evento inesperado. Tras el nacimiento de cuatro cachorros, la madre leopardo demostró una conducta inusual, poniendo en peligro a sus crías. Ante esta situación, el personal del zoológico se vio obligado a separar a los cachorros de su madre biológica, quedando solo Milasha, el leopardo.
Parece que no hay distancia entre ellos. (Foto: Actualidad.rt.com)
Para garantizar la seguridad y el bienestar de Milasha, se decidió buscar una madre adoptiva. La elegida fue Tessa, una Golden Retriever que acababa de tener también cuatro cachorros. Aunque esta solución generó preocupación entre el personal del zoológico, debido a la naturaleza salvaje del leopardo, la sorprendente conexión entre Tessa y Milasha superó todas las expectativas.
El leopardo creció bajo el amor de la madre del perro. (Foto: Actualidad.rt.com)
Desde el primer encuentro, Milasha mostró una alegría inmensa al estar junto a Tessa, buscando su compañía y protección. Durante tres semanas, bajo el cuidado amoroso de Tessa y una dieta adecuada, Milasha logró superar los desafíos iniciales y su salud mejoró notablemente. Además, el leopardo demostró ser muy receptivo a la educación de Tessa, creciendo de manera obediente y afectuosa.
Con el tiempo, el zoológico facilitó que Milasha interactuara con otros animales, como dos leones de su misma edad. A pesar de las diferencias de hábitos y temperamentos, Milasha se adaptó rápidamente, jugando y comunicándose cómodamente con sus nuevos amigos. Esta historia de amor y cuidado entre especies diferentes demuestra que los lazos de afecto pueden trascender las barreras naturales.
Este caso recuerda otros ejemplos de cuidado inter-especie, como el reportado por el periódico Sohu, donde un joven británico decidió cuidar a un cachorro de leopardo que encontró en el bosque, demostrando una vez más que el amor y la compasión pueden unir a seres aparentemente diferentes en un vínculo especial.