Si navegas en un bote por el enorme río Madre de Dios de Perú o uno de sus afluentes en la cuenca occidental del Amazonas, es posible que notes que las orillas del río están salpicadas de vivos rojos y azules: este es el hábitat principal de las guacamayas.
Los loros de colores del arco iris se congregan en estas laderas con otras especies de aves para probar el suelo rico en sodio. Numerosos turistas acuden en masa para ver el colorido espectáculo, y un grupo de entusiastas de la observación de aves pudo disfrutar de un vistazo particularmente raro a principios de año.
Durante una visita a la colpa de Banquillo, el grupo se maravilló con el brillante plumaje de un guacamayo rojo y verde desde un escondite mientras observaban cómo un ocelote se abalanzaba sobre el loro y lo arrastraba por el banco de arcilla hacia la densa jungla.
