En medio de un viaje por el bosque en busca de tigres, presenciamos una escena fascinante.
Un magnífico tigre macho había capturado un ciervo sambar y lo estaba asfixiando en medio del camino. De repente, el tigre se asustó por el ruido de una motocicleta y se alejó, dejando al ciervo casi sin vida abandonado.
En ese momento, una tigresa apareció y comenzó a alimentarse del ciervo. Al regresar el macho y ver a la hembra comiendo su presa, se enfureció y la atacó.
Hubo una pelea entre los dos tigres, donde a pesar de la diferencia de tamaño, la tigresa se defendió antes de ser obligada a retirarse.