Un atrevido fotógrafo ha producido una serie de imágenes alucinantes desde una posición extremadamente precaria con vistas al majestuoso Gran Cañón. Ivan Makarov aseguró la atención viral con sus impresionantes fotos tomadas mientras se encontraba en el borde literal de los acantilados del cañón.
Makarov, nacido en Rusia, es conocido por sus disparos vertiginosos desde alturas extremas en todo el suroeste de Estados Unidos. Sus últimas fotos llamativas lo muestran sentado con las piernas colgando sobre acantilados escarpados a miles de pies sobre el suelo del Gran Cañón.
Las imágenes brindan una vista que la mayoría de los turistas del parque nunca presenciarán de primera mano. Se ve a Makarov usando los afloramientos rocosos como asientos improvisados mientras toma fotos tranquilamente de las vistas panorámicas del cañón y el río Colorado que fluye debajo.
El fotógrafo usa un cortavientos pero no usa equipo de escalada ni arnés, confiando únicamente en su equilibrio y agarre para evitar caer al traicionero abismo del cañón. Las fotos dan una idea real de los precipicios del majestuoso hito natural.
Como era de esperar, los funcionarios del parque disuaden a los visitantes de intentar ellos mismos acrobacias tan peligrosas. Pero el ojo de Makarov para el encuadre dramático da como resultado imágenes que capturan la inmensa escala del Gran Cañón y provocan reacciones viscerales en los espectadores.
Las fotos que revuelven el estómago se difundieron ampliamente en las redes sociales, y muchos comentaristas expresaron asombro por el descaro del fotógrafo. Otros simplemente escribieron “NOPE”, lo que indica que nunca se atreverían a poner un pie en los zapatos de Makarov en los precarios acantilados.
Por su parte, Makarov continúa mostrando una intensa pasión por asegurar tomas únicas en la vida de las escenas naturales más impresionantes de Estados Unidos. Aunque desgarradoras, sus imágenes del Gran Cañón brindan una narración visual espectacular.