Aunque no se diferencian mucho de los leopardos normales en su comportamiento y características físicas, su pelaje negro debido a una condición genética los hace destacar. La excesiva producción de melanina oculta los patrones de rosetas característicos de los leopardos, lo que los convierte en una vista aún más impresionante en la naturaleza.
El avistamiento de un leopardo negro en su entorno natural es considerado una experiencia excepcional y emocionante. En comparación con los leopardos regulares, los leopardos negros son extremadamente raros de encontrar en la naturaleza, lo que los convierte en uno de los principales objetivos de los safaris fotográficos y las expediciones de vida silvestre.
El relato de presenciar a un leopardo negro cazando con éxito un cordero impala en Kenia es verdaderamente asombroso. Esta experiencia única ilustra la habilidad de los leopardos, tanto normales como negros, como depredadores altamente efectivos que pueden aprovechar su camuflaje y astucia para cazar con éxito a sus presas en la oscuridad de la noche africana.