1. El Barcelona anunció el fichaje de Ilkay Gundogan, el centrocampista alemán que el próximo octubre cumplirá 33 años, como si fuera un trofeo.
La marca Barça sigue fascinando a jugadores famosos como el excapitán del Manchester City. Priorizó a los gigantes catalanes a renovar con el equipo dirigido por Pep Guardiola tras ganar la Champions, además de rechazar una oferta millonaria de Arabia Saudí.
La contratación de Gundogan también es el modelo actual del Barça, cuando el club tiene una deuda de 1.350 millones de euros, así como se prevé que el fondo salarial se reduzca a 528 millones de euros para la próxima temporada.
Aunque no puede competir con los clubes más fuertes del fútbol europeo, la mayoría de los cuales pagan altas tarifas de transferencia por los mejores jugadores en la cima de sus carreras, el Barça apuesta por jugadores que están fuera de contrato.
Se trata de transferencias gratuitas, la mayoría de las cuales tienen más de 30 años. Estos casos quieren completar su aventura en lo más alto de Europa unos años más antes de jubilarse con cheques en EEUU o Asia.
Ahora el Barça no puede comprar estrellas jóvenes que se han consolidado como Jude Bellingham (Real Madrid) o el ex Erling Haaland (Man City). En cambio, el equipo convenció a Gundogan para que se mudara del Manchester City a Barcelona.
La duración del contrato es clave para que Gundogan decida fichar por el Barça sin quedarse en el club que acaba de conquistar el triplete.
El contrato con el Barça tiene una duración de 2 años, más la opción de ampliar a un 3.er año, más 9 millones de euros después de impuestos. Mientras tanto, los campeones de fútbol ingleses ofrecieron un mandato de un año, que puede extenderse por otro año.
Esta operación es similar al caso de Robert Lewandowski (que cumplirá 35 años en agosto) y el Barça seguirá con Íñigo Martínez (32 años), cuyo contrato con el Bilbao expira.
2. Los ricos y poderosos de la Bundesliga y la Premier League ofrecen contratos de un año, o una fórmula 1 + 1, a jugadores mayores de 30 años que han alcanzado la cima de sus carreras. Lewandowski y Gundogan son ejemplos.
El delantero polaco se vio obligado a marcharse al Barça por la imposibilidad de llegar a un acuerdo con el Bayern de Múnich, y realizó una muy buena temporada en España: 33 goles, incluidos 23 que le sirvieron para proclamarse máximo goleador de la Liga.
Las expectativas que el Barça deposita en Gundogan también son muy altas, después de que el internacional germano-turco terminara una gran temporada en el City.
El entendimiento entre Gundogan y Lewandowski es la clave del futuro. Los dos eran amigos mientras estaban en Dortmund.
Xavi Hernández necesita jugadores en buena forma para asegurar de inmediato el éxito sin demora, ya que el equipo ganó la última Liga. La inmediatez se impone aún más una vez que deja de existir el efecto palanca.
El Barça no puede gastar tanto dinero como el verano pasado, con Pablo Torre (5 millones de euros), Raphinha (58+9), Kounde (50+12,5) y el propio Lewandowski (45+5). Solo quedaba una cosa por desencadenar: vender jugadores que no entraban en los planes de Xavi.
La opción de fichar jugadores con carta libre, aunque luego sus contratos aumentaran económicamente, funcionó para Christensen pero no como se esperaba en el caso de Kessie.
En el centro Joan Gamper, la gente espera que el trato de Gundogan y Martínez dé sus frutos.
El mayor problema es encontrar un reemplazo para el capitán Busquets. La prioridad es Brozovic pero muy difícil, mientras que la otra opción es Parejo o Romeu, o arriesgar a Nico, el centrocampista de 21 años que estuvo cedido en el Valencia la temporada pasada.
Xavi entiende que en los últimos años ha habido un revés en la formación de jugadores de La Masia.
3. Ronald Koeman no tuvo éxito en el Camp Nou, pero se le atribuye haber dejado en herencia a jugadores como Pedri o Gavi, además de ayudar a madurar a Araujo.
Todos ellos se convirtieron en intocables en el proyecto futbolístico de Xavi. La despedida de los veteranos Busquets, Jordi Alba y antes Piqué ayudó al club a ahorrar mucho en salarios, fichando así para renovar a Gavi y Araujo en LaLiga.
Sin embargo, el registro de Iñigo Martínez y Gundogan no es posible en este momento.
La prioridad del Barça es dejar cedidos a cinco jugadores con un salario total de unos 51 millones de euros: Lenglet, Umtiti, Dest, Collado y Gustavo Maia.
Además, el mayor reto viene por el traspaso de algunos jugadores del primer equipo como Ferran Torres y Ansu Fati. No habrá nuevas inscripciones sin cortar el equipo actual.
La economía de la próxima temporada también se ve afectada al pasar del Camp Nou al Montjuic con menos asientos. Mientras tanto, el Barça espera la respuesta de la UEFA al escándalo de Negreira (pagar a exárbitros por consejos de partido) para conocer el futuro en la Copa de Europa.
El Barça no tiene los recursos del Real Madrid o de la Premier League, pero intenta distanciarse de clubes que han perdido protagonismo como el Milan, que también compite con el Gundogan.
“Barcelona o nada” , dijo Gundogan sobre su elección. La marca Barça sigue teniendo un gran atractivo y el club trata de capitalizarlo cuando no hay apalancamiento económico.