De todos es sabido que una perrita es sinónimo de bondad. Y cuando adopta a una camada de gatitos bebés, traspasa los límites de lo establecido. No importa cómo ni dónde ocurran este tipo de escenas, lo cierto es que, las imágenes de animales cuidando de otra especie nos dan una gran lección.
Nuestra tierna protagonista responde al nombre de Georgia. Se trata de una perrita rescatada quien adoptó sin problemas a una pequeña camada de gatitos bebés.
Deseaba cuidar de los bebés que perdió
Lamentablemente, al momento de ser encontrada, la dulce canina, quien vivía cerca de una gasolinera ubicada entre la frontera de Estados Unidos y México, se encontraba muy mal.
Estaba embarazada y sumamente desnutrida. Debido a su terrible condición de salud, por desgracia, ninguno de los perritos sobrevivió al parto. Todo por la irresponsabilidad y la indiferencia de las personas.
Sin embargo, de tanto deambular, se hizo conocida en la zona y fue ayudada por un refugio local de animales llamado Sunshine Dog Rescue.
Sus voluntarios la trasladaron a sus instalaciones para practicarle la labor. Sin embargo, a pesar de los intentos del grupo de expertos, los bebés nacieron antes de lo previsto.
Pronto su vida triste quedaría atrás
“Nunca antes había tenido una mamá que perdiera una camada entera. Estaba frenética. Rompió el colchón para niños pequeños en el que la teníamos, tratando de encontrarlos”, dijo Anita Osa, fundadora del refugio.
Tras lo sucedido, Anita realizó un llamado público a través de sus cuentas en las redes sociales, con tal de buscar hasta encontrar a otro animal. Sin importar su especie, tan solo uno que requiriese de una madre sustituta.
Todo ello, con la intención de devolverle a Georgia la alegría perdida. De esta manera fue como llegó un trío de adorables y tiernos gatitos huérfanos. Todos se acomodaron dulcemente en el regazo de esta tierna mamá canina.
Y es que, como en una ecuación perfecta, así como Georgia perdió a sus hijos, estos mininos también perdieron a su madre en el parto. Por lo tanto, necesitaban con urgencia de alguien que los impulsara a crecer sanos. Así adopta Georgia como suyos a sus mininos.
¿Y quién mejor que esta solitaria perrita para alimentar y darles todo el amor que se le quedó dentro tras su fallido intento de ser madre? Este ser que adopta sin esperar más que amor a cambio es, sin lugar a dudas, algo digno de admirar.
“Se los presenté con delicadeza. Primero tomé uno y dejé que lo oliera. Fue increíble ver cómo se calmó instantáneamente. Creo que los gatitos no tienen idea de que Georgia es una perrita”, dijo Anita en una publicación.
El mundo animal nos demuestra una vez más que, el amor que estos seres tienen dentro de sí no es exclusivo de su misma especie, sino que es tan amplio que es capaz de superar cualquier diferencia y abrazar a todo aquel que necesite ser abrazado.
Se convirtió en la mejor de las madres y la vida la recompensó con un amoroso hogar
Georgia es la encarnación del instinto y la necesidad maternal. Pero, además, un ejemplo de que, sin importar la raza o la especie que sea, el calor y el cariño de una madre es incondicional, y siempre estará allí para quien lo necesite. Para la perrita, los pequeños felinos son sus hijos.
Siempre será la mejor madre
Los alimenta, los acicala y los acaricia con dulzura, los adopta como a sus propios retoños. Esta historia nos recuerda que, a pesar del dolor y la pérdida, la vida es equilibrio y también nos otorga segundas oportunidades en premio a nuestra demostración de entrega y amor por los demás, sin importar su condición.
Los expertos en comportamiento animal aún no tienen del todo claro el origen de este curioso comportamiento. Sin embargo, se cree que los animales cuidan de las crías ajenas a su especie para saciar su instinto maternal. Y es que, definitivamente, su nobleza les impide ver más allá de las diferencias.